Platos de agua de lluvia
Todos los sumideros pluviales: verticales, horizontales y rebosaderos, para cubiertas frías y calientes. Los accesorios asociados son las piezas adhesivas para confirmar la estanqueidad, las cajas de agua o los adaptadores de gárgolas para recoger el agua que sale de los sumideros horizontales y evitar el escurrimiento de agua en la pared. La seta limita y frena la obstrucción de las salidas de agua de lluvia por las hojas muertas.
Gestionar el drenaje de agua de lluvia
Una cubierta plana siempre está rodeada de parapetos o muros, por lo que es necesario instalar un sistema de drenaje de aguas pluviales.
La solución es muy simple:
- El soporte del techo debe tener una pendiente mínima de alrededor del 5%. A pesar de su nombre de "cubierta plana", esta mínima pendiente es absolutamente imprescindible. Para techos planos de gran superficie, generalmente hay varias pendientes y posiblemente canaletas si ciertas partes inferiores no están en la periferia del techo.
- En la parte inferior del talud (o taludes) del apoyo, el agua será evacuada por las placas de pluviales, también denominadas tomas de pluviales. Estos desagües pluviales deberán preverse en cantidad y tamaño suficientes en relación con la superficie de la cubierta.
- Finalmente, las salidas de agua de lluvia desembocan en un sistema de drenaje formado por cajas de agua, adaptadores de gárgolas, bajantes de agua de lluvia. Este sistema canaliza el caudal a un colector de agua o directamente al sistema público de recogida de aguas pluviales.
La necesidad técnica
En ausencia de un adecuado sistema de drenaje (ausencia total o insuficiencia), el agua de lluvia provoca un efecto "charco" con estancamiento prolongado de una gran cantidad de agua.
Demasiada agua estancada en el techo puede dañar la construcción: por sobrecarga del soporte del techo, por presión excesiva sobre la impermeabilización.
Cabe señalar, sin embargo, que la presencia de pequeños charcos temporales no supone un problema, ya que se eliminan de forma natural por evaporación.
La reglamentación
La legislación impone ciertas restricciones a todas las propiedades y construcciones que pueden complementarse con las reglamentaciones locales.
El artículo 681 del Código Civil establece que el techo de una construcción debe permitir el flujo de agua de lluvia en terrenos privados o caminos públicos.
Está terminantemente prohibido que el agua que se acumula en su techo fluya hacia la propiedad de su vecino.
La captación de agua de lluvia y la cuestión ecológica
Por razones ecológicas y económicas, la recuperación del agua de lluvia tiene muchas ventajas, se integra cada vez más en obras de nueva construcción o renovación.
La valorización puede destinarse al riego del jardín o de los cultivos, pero también al uso doméstico para el que aún es necesario distinguir varias categorías:
- Uso no alimentario y no corporal: descarga de inodoros, lavado de suelos o vehículos.
- uso sanitario: higiene personal y lavado de ropa.
- uso alimentario: bebidas, preparación de alimentos y vajillas.
Los usos sanitarios y alimentarios están sujetos a estrictas normas de tratamiento obligatorio de las aguas pluviales.
Para más información oficial sobre captación de agua de lluvia: Servicio Público: Captación de agua de lluvia.